LAS CONDICIONES PARA INVERTIR EN LA REGIÓN DE AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE ESTÁN MEJORANDO, CON LA NOTICIA DE QUE LA INVERSIÓN EXTRANJERA DIRECTA (IED) CRECIÓ UN 4% DURANTE 2022.

Con $USD208.000 millones de inversión, la región recuperó totalmente el terreno perdido en 2020 y alcanzó el segundo nivel más alto jamás registrado.

Durante el periodo pandémico entre 2020 y 2021, las entradas de Inversión Extranjera Directa (IED) cayeron hasta los $USD89.000 millones.

Parte de esta recuperación se explica por las cifras récord de reinversión en Brasil. Otros países de América Latina se beneficiaron del aumento de los anuncios de proyectos greenfield*.

Los anuncios de proyectos greenfield en los países en desarrollo aumentaron un 37%, casi duplicando su valor.

Costa Rica, Uruguay y Colombia destacan como los países con mejor desempeño en cuanto a atracción de IED en la región de América Latina y el Caribe, según el Índice de Desempeño de Entradas de IED 2023 de Investment Monitor.

El país anfitrión de Coyol Free Zone recibe más de 12 veces su cuota de entrada de IED greenfield en comparación con lo que cabría esperar, dado su nivel de Producto Interior Bruto (PIB). Esto ubica a Costa Rica en el puesto #1 a nivel mundial en el índice.

Sólo durante el primer trimestre de 2022, esta nación centroamericana atrajo 60 proyectos de inversión, según Coalición Costarricense de Iniciativas de Desarrollo (Cinde).

Entre estos destacan proyectos de inversión y reinversión en Coyol Free Zone, los cuales fueron anunciados por empresas de manufactura de dispositivos médicos de clase mundial, como Shockwave Medical, Riverpoint Medical, Steris y Cadence, Inc.

El sector de las Ciencias de la Vida sigue impulsando la mayor parte de la IED en Costa Rica, además de actuar como catalizador de las exportaciones. Los dispositivos médicos representan el principal producto de exportación del país, con un 34% del total de bienes exportados.

*Proyectos greenfield: Los proyectos greenfield son un tipo de Inversión Extranjera Directa (IED) donde un inversionista no residente en el país construye desde cero las instalaciones para la puesta en operación de un proyecto, negocio, o subsidiario en un país en el extranjero, habiendo traído todo el capital necesario desde el exterior, inyectando así, divisas a la economía.